Guillermo Rigondeaux ira este viernes a una dura prueba ante el experimentado brasileno Geovanni Andrade en el Hotel Fontainebleau.
EL NUEVO HERALD
POR LUIS E. RANGEL
LRANGEL@ELNUEVOHERALD.COM
El pugilista cubano está al tanto de su trayectoria en el pugilismo amateur y no cesa de recordarlo. Ahora su objetivo es reconocerse también como uno de los más grandes en el apartado profesional.
Y con apenas dos peleas de experiencia desde que abandonó el boxeo aficionado, el cubano ya está apuntando a dar un gran paso que lo colocaría muy cerca de su meta.
Rigondeaux peleará este viernes en el Hotel Fontainebleau de Miami Beach ante el brasileño Geovanni Andrade en donde el ganador se alzará con el título continental.
"Yo estoy preparado para esta pelea. No hay mucho que hablar. Ahora sólo falta decir las cosas con los puños'', sostuvo Rigondeaux, quien será uno de los varios pugilistas cubanos que se subirá ese día en el ensogado en una cartelera que se transmitirá en todo el país por ESPN2.
Rigondeaux tendrá no sólo a Andrade como enemigo, sino también a una experiencia que no pudo imaginar en su dilatada trayectoria amateur: ir hasta los diez rounds.
"Eso no me preocupa, estoy listo para ir 12 o 14 rounds si es necesario. Con la preparación que tengo no hay ningún problema. Igual acá no habrá sorpresas'', señaló Rigondeaux en clara referencia a un posible revés ante Andrade, un brasileño con más de 70 peleas -incluyendo 49 de sus 60 triunfos por nocáuts, y combates contra Juan Manuel López y Celestino Caballero.
"Creo que vamos a dar un buen espectáculo. Ambos somos rápidos y es un gran honor pelear contra él. Pero a mí me gusta bastante el chance que tengo'', apuntó Andrade, quien enfrentará a lo que pudiera ser un Rigondeaux un tanto diferente.
Y es que el santiguero tiene un nuevo aliado en su esquina, un veterano que hoy es considerado uno de los mejores entrenadores del planeta, Freddy Roach, el mismo que está detrás de Manny Pacquiao.
"He aprendido unas cuantas cosas con él, algunos secretos. Varios movimientos que en el amateur no utilizaba. Aquí tengo que llevar las cosas en forma más lenta, es decir, la estrategia es diferente, más pausada. Y también he trabajado con él para mover más mi tronco'', apuntó Rigondeaux.
Una victoria catapultaría al dos veces campeón olímpico entre los cinco mejores del ránking del peso supergallo y sería un paso más hacia la consolidación de una distinción, que los que han seguido su carrera desde Cuba coinciden en que algún día tendrá, la de mejor boxeador libra por libra del planeta.
• La cartelera del viernes incluirá peleas del cubano Yudel Johnson contra el boricua Frankie Santos, el también antillano Yordanis Despagne contra Micky Scarborough, así como el dominicano Félix Díaz -ganador de la medalla de oro en los pasados Juegos Olímpicos- contra Omar Brown.
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