YUNEL ESCOBAR se ha convertido en el líder ofensivo de los Bravos a tal punto de que se mantiene como el máximo impulsor de un equipo en donde también se encuentran bates como el de Chipper Jones y Brian McCann.
GREGORY SMITH / ASSOCIATED PRESS
POR ASSOCIATED PRESS
NUEVA YORK
Si los Bravos de Atlanta están ahora mismo remando fuerte para clasificarse a los playoffs, la decisión de poner a Yunel Escobar como quinto al bate es posiblemente una de las claves.
Esta es la tercera campaña en las Grandes Ligas para el campocorto cubano de 26 años que en el 2004 escapó en bote de Cuba.
Falta mes y medio en la temporada regular y Escobar puede presumir de sus mejores estadísticas individuales. También puede sentir el cosquilleo de disputar partidos de vida a muerte en los meses finales con un club que en los años anteriores había quedado muy rezagado.
Atlanta ha amasado un récord de 19-12 tras la pausa por el Juego de Estrellas, apenas por detrás de los Cardenales de San Luis por el mejor porcentaje en la Nacional.
El empuje reciente de los Bravos ha tenido mucho que ver con que el mánager Bobby Cox decidió mover piezas en el orden ofensivo y el golpe de efecto fue inmediato con un mejor despliegue de poder y balance.
Escobar ha marcado una de las principales diferencias al bajar con su madero del segundo turno para quinto o sexto.
Su promedio ha sido de .310 después del Juego de Estrellas, conectando cuatro de sus 11 jonrones a partir de entonces. Lidera al equipo en carreras remolcadas (60) y en juegos con más de dos hits (32).
Además inició la semana con el promedio más alto en la Nacional (.412) con corredores en posición anotadora.
Escobar no tardó en tomarle el gusto a su nuevo papel en el orden ofensivo, al darse cuenta de una ventaja: estudiar a los pitchers contrarios.
"Ahora tengo cinco bateadores o hasta cuatro adelante. Puedo saber lo que están tirando'', dijo.
"(Como) el segundo bateador no me daba tiempo para conocerlo. Siempre me ha gustado batear adelante en los conteos, y a veces me engañaban mucho con los primeros pitcheos. Como quinto o sexto me ajusto un poco más a los pitcheos''.
Hasta ahora, su reputación dependía en gran medida de su guante, pero su evolución con el bate le puede llevar pronto a codearse ente los mejores en su posición.
Cada equipo en el Este de la Nacional cuenta con un torpedero que ha sido seleccionado al Juego de Estrellas, una lista que incluye a Hanley Ramírez, José Reyes, Jimmy Rollins y Cristián Guzmán.
Todo indica que, tarde o temprano, Escobar alcanzará esa categoría.
Y lo que Escobar ahora disfruta más es la experiencia de jugar con un equipo con ambiciones de postemporada, ya que Atlanta está a cuatro juegos del wild card.
"Me sube más el nivel como pelotero, porque el año pasado estábamos 20 juegos atrás. Este año estamos ahí. Es el momento cuando los niños tienen que dejar a los padres. Ahora es que hay dar el 100 por ciento'', sostuvo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario